SESIÓN 5: DINERO, DINERO, DINERO
Conviviendo con tus hijos adultos
Ofreceremos perspectiva valiosa y sugerencias prácticas para este aspecto muchas veces incómodo de la relación con los hijos adultos. ¡Hablemos de dinero!
Status: In Progress
Session ToolsNARRADORA: Gracias por estar con nosotros en la sesión cinco de “Viviendo con tus hijos adultos”. La conversación de hoy es toda acerca del dinero, dinero, dinero. Cada padre o madre de hijos adultos puede identificarse con la lucha de querer estimular la independencia financiera y al mismo tiempo desear ayudar a sus hijos cuando sea necesario, ¿pero exactamente cuándo es apropiado? ¿Y cómo puedes preparar mejor a tus hijos adultos para la libertad financiera? En la sesión de esta semana, Jim nos guiará hacia principios valiosos y nos dará consejos útiles para este aspecto a veces incómodo de la relación con tus hijos adultos.
Tu hijo adulto no debería ser la ruina financiera del hogar. Quizás recuerdan la película “Hogar dulce hogar”, pues algunos de nosotros tenemos hijos adultos que están siendo la ruina financiera, o al menos hay momentos en lo que así se siente obviamente. La conversación de hoy será muy práctica. Será orientada a la acción. Prepárate y toma notas. Aquí vamos.
Primero que nada, mantén el fin en mente. Me escuchas decir esto muchas veces. La meta es la responsabilidad e independencia financiera, así que mantén esto en mente. Ahora al hacer esto, recuerda que el 75% de los padres ayuda a sus hijos en algún momento. Así que si estás ayudando a tu hijo, no estás solo. Muy bien. Hay que desarrollar un plan que tenga una estrategia para la salida. Muchos padres empiezan a desembolsar dinero y no tienen un plan ni una estrategia para salir. Así que desarrolla un plan, desarrolla una estrategia para salir de ello. Debes saber esto, que muchas veces decir “te amo”, significa decir “no”. Aun si tienes el dinero, no es lo mejor para ellos. Así que, “te amo, no”. De acuerdo. Recuerda que el costo del dinero es muy alto para pagar en una relación, no lo compliques.
Muy bien, ¿cómo evitas estar financiando a tus hijos para siempre? Hay personas que han estado haciendo esto por mucho tiempo, ellos necesitan aprender algo de esto. Acoge su independencia, pregúntate, “¿Darles dinero, ayudará a que sea independiente o prolongará su dependencia de nosotros?” Esta es una pregunta que debimos hacernos para algunas áreas claves.
Distingue entre necesidades y deseos. Solo recuerda cuando eran pequeños, ellos tenían lo que ellos llamaban necesidades, cuando en realidad eran deseos. Necesito helado. Yo quiero esto, debo ir a Disneyland, cosas como estas. ¿Sabes qué? Necesitamos ayudarles a distinguir esto, y no siempre es fácil.
Luego establece parámetros muy claros. Sé lo más claro posible y dales de acuerdo a tus necesidades. Lo que quiero decir es que no te hagas financieramente vulnerable por rescatar siempre a tus hijos. De hecho, conozco a alguien que uno de sus hijos quería una casa, usaron todos sus fondos de retiro para conseguirla. Ellos ayudaron a que obtuvieran su casa soñada, mejor que la de ellos mismos. Después lo que sucedió con los padres fue que no pudieron retirarse, porque ahora debían trabajar por estar financieramente en apuros y la verdad es que sus hijos no necesitan esas casas tan lujosas. Así que dales de acuerdo con tus necesidades y no te disculpes por eso.
Ahora, una cosa más que considero importante para los padres cuando estamos hablando de dinero, es que debemos convertirnos en sus mentores. Enséñales, entrénalos en una buena administración. Asegúrate, primero que nada, de hablar sobre dinero con tus hijos. A veces puede ser incómodo, y no encaja si no tienes dinero. No importa, sigue hablando acerca de dinero. También si tienes mucho dinero. Sé de una familia que su valor monetario era de $300 millones, murieron y dejaron todo su dinero a una fundación. Sus hijos no recibieron nada de ese dinero.
Bueno, ellos podían hacer lo que quisieran con su dinero. Ahora los hijos están muy molestos y están demandando a la fundación. Están enojados entre ellos y con sus padres. Los padres muy fácilmente pudieron haber dicho, “Miren no obtendrán nada de nuestro dinero”, pero no estuvieron dispuestos a hacerlo. Así que habla acerca de dinero. Mírate como un mentor, ellos necesitan mentores que les enseñen una buena administración financiera. No estoy diciendo que lo harás a la perfección. Ningún mentor es perfecto; pero sí, sé su mentor. Con ser mentores me refiero a que digas, “yo quiero enseñarles a mis hijos a ser buenos administradores”. Así que lo que les enseñamos no es solo de nuestra experiencia, hay que apuntarlos a otras personas. Y principalmente, “Dios es dueño de todo”, esto es algo que les decimos a nuestras hijas.
No existe algo como una total decisión financiera independiente porque se mezcla con todo. Algo que hemos tratado de enseñarle a nuestras hijas es que atrasar la gratificación es la clave para alcanzar madurez financiera. Yo no soy un experto en finanzas, solo estoy diciendo, “Mira, si pospongo mi gratificación, y no lo gasto en algo que no tengo, a largo plazo seré más feliz”. Esto es algo difícil que nuestros hijos entiendan.
Así que, en otras palabras, gasta menos de lo que ganas. Pero si pudiéramos hacer que lo entiendan nuestros hijos, ayudaría muchísimo. Especialmente porque muchos luchan con deudas. Lo que quiero enseñarles a nuestros hijos en términos de ser su mentor es que la deuda no es señal de una buena administración. Porque no solo tendrán una gran deuda, sino que por ejemplo, cuando se casen…
Saben el 26% de los matrimonios que pierden el rumbo es porque están constantemente peleando por dinero. En parte, esto es por las deudas. Así que enséñales a tus hijos a ser libres de deudas lo más que puedan. Yo les digo a mis hijas, y lo digo en consejería prematrimonial, un presupuesto es obligatorio.
Así que enséñales a tus hijos cómo hacer un presupuesto. No saben cómo hacerlo. Así que enséñales cómo hacerlo. Tal vez tengas tú que hacer un presupuesto antes de darles esa herramienta. Siempre les enseñamos a nuestras hijas que hagan de esto un principio: 10% se da, 10% se ahorra. Conozco muy poca gente que da 10% y ahorra 10%, sin importar cual sea su ingreso, y que no sean buenos mejore administradores que otros. Esto es porque lo entendieron. Así que enséñales esto. Por último, encárgate de la complicación de ante mano. Para que el dinero no se convierta en un obstáculo, un problema, una grieta en la relación con tu hijo adulto.